viernes, 17 de julio de 2015

Utopías

Estoy harto de la gente que intenta chafarte tus planes, tus sueños, tu futuro, tu utopía. Sí, tu utopía. Estoy seguro que cada uno ha soñado con la suya, o si no al menos ha leído y comprendido algún libro basado en un mundo utópico (o distópico en contrapartida). Sinceramente, me hace mucha gracia la visión que tiene los libros de las utopías, como algo inalcanzable, algo que siempre acaba discriminando a cierto sector de la sociedad. No me refiero por ejemplo a Los Juegos del Hambre, en los que la utopia de paz y tranquilidad dista mucho de la realidad. Es un ambiente de crispación, de deseo de que algo cambie. Me refiero más bien a sistemas que en un principio son más parecidos a los de Divergente. Yo he visto la pelicula (y no, no he leído el libro, si hay algo que digo mal aquí y que en el libro se explica mucho mejor, por favor indicarlo) y se me han quedado muchas ganas de realmente saber como funciona el sistema de facciones. ¿Realmente estaba tan mal? Vale que cierto sector quisiera hacerse con el poder y que en el sistema no se contemplara la existencia de seres que no encajaran con las facciones, pero en su raiz, ¿realmente estaba tan mal? Yo al menos creo que es más igualitario que el sistema actual, un mundo basado en un único amo, el dinero. Ojalá en un futuro las cosas se solucionen sin necesidad de capital.
No nos podemos quedar de brazos cruzados. Los mundos ideales no existen, eso hay que tenerlo claro, pero no por ello podemos dejar de luchar por crear un mundo mejor, más igualitario. Siempre he pensado que las utopías tienen una raiz central o unas ideas que pueden extraerse y  realizarse en mundo real. Lo que nos falta es aplicarlas. Lo que nos falta es creer en ellas. Lo que nos falta es confiar más en el prójimo. Tenemos que ponernos en marcha, idead, crear, construir una nueva sociedad a nuestro paso, cada vez mejor, cada vez más perfecta. Porque la perfección no existe, sí, pero ello no significa que tengamos que rendirnos, sino que debemos intentar llegar. Pensad en ella como si fuera un límite matemático.
Con todo ello, resumo. No porque las utopías sean inalcanzables tenemos que caer, sino seguid de pie y avanzad para alcanzar un mundo mejor. Y por si alguien no la ha visto, y se aprecia a si mismo, recomiendo encarecidamente la película Tommorrowland (no, no es sobre el festival xD). No podemos tragarnos el futuro que tan desastroso parece esperarnos, sino que debemos cambiarlo.

1 comentario:

  1. Muy de acuerdo con tu visión de las utopías ^^.
    No he visto Tomorrowland, pero quiero verla ;).
    En cuanto a Divergente, el problema del sistema de facciones, como tú bien has señalado, es que no contempla a nadie que pueda salirse de los esquemas. Por otro lado, es bastante inhumano separar a los hijos de los padres y de los hermanos a los 16 años para toda la vida, sin posibilidad de reencuentro. Al fin y al cabo, uno de los derechos más esenciales del ser humano, es la capacidad de libre elección y libre albedrío. Sin esos valores no se puede concivir ninguna verdadera utopía.
    Me ha gustado tu reflexión ;).
    Muchos besos desde lecturasilenciosas.blogspot.com

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